Murieron los rollos de cocina: la nueva opción que gana terreno por su practicidad y bajo precio
Una alternativa lavable y resistente se impone como la opción preferida en hogares que buscan reducir gastos y generar menos residuos.

Durante décadas, el papel absorbente fue un aliado cotidiano en la limpieza del hogar, pero ese reinado comienza a diluirse. La combinación de un gasto mensual sostenido y el impacto ambiental que genera su descarte, hizo que muchas personas replanteen su uso. En su lugar, empiezan a destacarse los paños de tela reutilizables, más duraderos y amigables con el entorno.
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Murieron los rollos de cocina: la nueva opción que gana terreno por su practicidad y bajo precio
Este cambio de hábito se enmarca en una tendencia de consumo más responsable, donde el cuidado del presupuesto y del planeta se vuelven prioridades. La propuesta consiste en incorporar repasadores hechos de microfibra, algodón o incluso telas recicladas. Se trata de productos que se lavan fácilmente y pueden usarse durante meses, sin necesidad de reposición constante.
Algunas versiones modernas incluso mantienen la presentación en rollo, simulando el formato tradicional, pero con una ventaja clave: se adhieren mediante velcro y se colocan directamente en el lavarropas tras cada uso. Esto ofrece la familiaridad del modelo clásico con los beneficios de la reutilización.
Las ventajas de dejar el papel descartable son muchas y claras:
- Ahorro sustentable: aunque la inversión inicial pueda ser más alta, se evita la compra recurrente.
- Menos desechos: al reducir el uso de productos de un solo uso, baja la generación de basura.
- Larga vida útil: resisten numerosos lavados sin perder eficacia ni deteriorarse fácilmente.
- Impacto ecológico positivo: cada elección ayuda a disminuir la tala innecesaria de árboles.
- Multipropósito: limpian, secan y hasta pueden reemplazar servilletas de mesa.
- Diversidad de opciones: hay versiones en distintos materiales, desde bambú hasta prendas recicladas.
- Diseño y funcionalidad: vienen en presentaciones decorativas que suman estilo a la cocina.
- Mayor resistencia: no se rompen ni vuelan, algo común con el papel, sobre todo al tratar grasa o líquidos.
- Rendimiento familiar: ideales para casas con alto consumo, evitando el gasto excesivo en papel.
- Aporte sustentable: un gesto cotidiano con efectos duraderos en el ambiente.
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