Pocos lo saben: el truco casero con papel aluminio para eliminar el hielo del freezer sin esfuerzo
Un método rápido y efectivo que mejora el funcionamiento del congelador, evita daños y ahorra energía en la cocina.

En muchos hogares, mantener el freezer en óptimas condiciones puede volverse una tarea engorrosa, sobre todo cuando se acumula hielo en exceso. Para resolverlo sin arriesgar el aparato existe una técnica sencilla y sin costo que se puede aplicar con elementos comunes de cualquier cocina.
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Pocos lo saben: el truco casero con papel aluminio para eliminar el hielo del freezer sin esfuerzo
La escarcha es frecuente en modelos que no poseen sistema No Frost. Sucede cada vez que se abre la puerta, permitiendo el ingreso de aire húmedo. Esa humedad, al enfriarse, se transforma en hielo que se adhiere a las paredes internas.
Con el tiempo, ese hielo reduce el espacio útil y obliga al motor a trabajar más, generando mayor consumo energético y menor rendimiento. Para evitarlo, se puede aplicar una técnica casera muy útil, no hace falta gastar ni recurrir a productos químicos. Solo se necesitan:
- Papel aluminio (varios trozos grandes)
- Una olla (que quepa en el freezer)
- Agua
- Fuente de calor
Cómo eliminar el hielo del freezer paso a paso:
Este método aprovecha el calor y el vapor para ablandar la escarcha sin dañar el aparato ni usar elementos peligrosos.
- Vaciar completamente el freezer, retirando bandejas y alimentos
- Forrar las paredes internas con trozos grandes de papel aluminio, bien adheridos
- Hervir agua hasta que llegue al punto de ebullición
- Colocar la olla con el agua hirviendo dentro del freezer, sobre un repasador seco
- Cerrar la puerta y dejar actuar durante 10 a 15 minutos
- Abrir y retirar el hielo, que se habrá soltado fácilmente
- Secar todo con un trapo limpio antes de volver a enchufar
El aluminio distribuye el calor de manera uniforme, y crea una especie de baño de vapor en el interior. Este efecto facilita que la escarcha se desprenda sin dañar el revestimiento del freezer. Se recomienda realizar este proceso cada tres o cuatro meses, o cuando la capa de hielo supere los 5 milímetros. Así se mejora el rendimiento del equipo, se ahorra electricidad y se prolonga la vida útil de los alimentos.
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